n gran desembarco se produjo este Sábado 24 de Agosto, en Lampedusa, donde, tras el rescate de una embarcación de 10 metros por la patrullera Cp271, bajaron 125 -entre ellos, cuatro mujeres y cinco menores de edad- bangladesíes, egipcios, eritreos, etíopes, paquistaníes y sirios.
El grupo zarpó desde Sabratah, Libia, tras pagar entre 5.500 y 7.000 euros para la peligrosa travesía.
Luego trascendió que los desembarcos aumentaron a cinco en pocas horas, donde llegaron un total de 301 inmigrantes.
En ese dramático contexto, una joven etíope dio a luz, al amanecer, en un barco de fibra de vidrio de 10 metros en el que viajaba con 46 personas.
La embarcación precaria había salido de Zuwara, en Libia, y fue rescatada por la policía financiera.
Inmediatamente después de desembarcar en el muelle de Favarolo, en Lampedusa, la mujer y el recién nacido fueron trasladados a la clínica de la isla.
Ambos gozaban de buena salud, se informó.
Por otra parte, el papa Francisco, envió sus bendiciones a la tripulaciones de Mediterranea Saving Humans y de Migrantes, barcos que llegarán esta tarde a la zona de operaciones SAR, al sur de Lampedusa.
Mediterranea Saving Human es una organización humanitaria fundada por Luca Casarini que, desde 2018, rescata a personas que intentan la peligrosa travesía marítima.
A través del sacerdote Mattia Ferrari, escribió a las tripulaciones: “Les deseo lo mejor y envío mi bendición a la tripulación del Mediterranea Saving Humanos y a Migrantes. Rezo por ustedes. Muchas gracias por tu testimonio.
Que el Señor los bendiga y Nuestra Señora los cuide. Fraternalmente, Francesco”.
“Al objetivo prioritario de la misión de salvaguardar a todas las vidas humanas en peligro en el mar -explicó Laura Marmorale, presidenta de Mediterranea Saving Humans- se suma el de prevenir las interceptaciones y rechazos de inmigrantes hacia puertos y países inseguros”, como Libia y Túnez, donde se niegan los derechos fundamentales y la propia seguridad de las personas está en riesgo a diario”.
“Interceptaciones y rechazos que son violaciones abiertas del derecho internacional, humanitario y marítimo”, añadió.
Trapani es el punto de partida de la misión SAR lanzada hoy, 24 de agosto, por Mediterranea Saving Humans.
La de Mediterranea Saving Humans es la primera misión organizada conjuntamente con la Fundación Migrantes de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI).
Gracias al apoyo de los obispos, el Mare Jonio, un remolcador reutilizado para las operaciones SAR de Mediterranea, se le unirá un barco de apoyo que transportará a otros voluntarios y personal médico, además de un mediador cultural y un pequeño grupo de periodistas.
“Se trata de un barco de apoyo preparado junto con Migrantes -explicó Mattia Ferrari- con dos directores diocesanos de Fano y Caltanissetta a bordo. Se trata de una colaboración más con la Iglesia que se viene realizando desde hace años y que, sobre todo, de muchas relaciones y en varios niveles, desde las parroquias hasta las diócesis, hasta la Iglesia universal”. © ANSA