Todo comenzó cuando Personal de la División Investigaciones Delictivas, perteneciente al Departamento Contravenciones y Faltas de la Policía de la Ciudad, se hizo presente en un domicilio ubicado en la avenida Francisco Beiró al 3800, que según una denuncia previa de un vecino, era utilizado como un criadero de perros.
En total fueron dos los procedimientos en el lugar, ordenados por el Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas Número 8, a cargo de la Dra. Molina, y que tuvieron la intervención de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), del Dr. Santurián, y del Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ).
En el último de ellos, realizado en las últimas horas, fueron rescatados un cachorro y tres perras, todas de la raza Staffordshire Bull Terrier. En este sentido, dos de ellas están preñadas y la restante dio a luz en los últimos días.
Se trata del mismo domicilio en el que días atrás fueron hallados en un primer operativo otros seis perros de la misma raza, Staffordshire Bull Terrier, junto con dos Bulldog Francés, los cuales estaban encerrados en jaulas en la terraza en un avanzado estado de deshidratación.
El magistrado interventor dispuso el secuestro de los animales y su entrega a una ONG especializada en perros, además de imputar al propietario del lugar, un hombre de 42 años, al que se lo notificó de la causa de Maltrato Animal y de las contravenciones de los artículos 138 y 140 del Código Penal.
También se procedió a clausurar el criadero ilegal. En total, se secuestraron 12 paneles, tres jaulas de transporte y dos bolsas con alimento.
Participaron del procedimiento la División Perros, médicos veterinarios de la Agencia de Protección Ambiental con ecógrafos, la Agencia Gubernamental de Control (AGC), la DGPT y la DGFyC.