(ANSA) – ROMA, 16 MAR – A poco más de un año del inicio de la pandemia, mientras se intenta acelerar las vacunaciones masivas para detener el virus, el mundo aún cuenta las víctimas del Covid-19: al menos 2.654.089 muertos hubo a nivel global, de los cuales un tercio se registraron en Europa.
De hecho, el Viejo Continente superó el umbral de las 900 mil decesos por coronavirus, según cálculos de la prensa europea basados en datos oficiales de todos sus 52 países y territorios, desde Portugal a Rusia, desde Islandia a Turquía, en los que hubo 42,7 millones de casos confirmados desde el inicio de la crisis sanitaria.
Y si Estados Unidos, Brasil, México e India encabezan el triste ranking de fallecidos por Covid-19, los dos primeros países europeos en llorar a sus muertos son el Reino Unido (126 mil) e Italia (más de 103 mil), país con casi todas sus regiones nuevamente en «zona roja».
Los contagios, de hecho, impulsados por diferentes variantes, continúan aumentando y Europa teme o ya está en plena tercera ola.
Así es el caso de Francia y Alemania, donde se habla de nuevas medidas de contención.
En un discurso en la Assemblée Nationale un año después del primer cierre nacional, el primer ministro Jean Castex advirtió que el virus «juega en la prórroga» y que el país ingresó en una forma de «tercera ola» de la epidemia, «caracterizada por numerosas variantes».
Frente al aumento de contagios y la saturación de las terapias intensivas que obligó a organizar la evacuación de un centenar de pacientes de la región parisina de Ile de France a otras estructuras de la provincia, el presidente Emmanuel Macron, que se reunirá mañana con el Consejo científico, ya anunció que «en los próximos días» se tomarán «nuevas decisiones» para frenar la pandemia.
Incluso Alemania, que acababa de relajar las medidas, teme la agudización de la curva de contagio con el dramático llamamiento del pasado lunes de los médicos de terapia intensiva de cerrarlo todo.
Según los rumores de los medios locales, Berlín está considerando la posibilidad de extender el bloqueo que termina el próximo 28 de marzo por otras cuatro semanas.
Se tomará una decisión en la próxima cumbre sobre el coronavirus entre el gobierno federal y los estados el próximo 22 de marzo.
Fuera de las fronteras europeas, es Estados Unidos el que cuenta con el mayor número de víctimas de Covid-19, con más de 500 millones de decesos.
El presidente, Joe Biden, prometió una aceleración de la estrategia de vacunación, que debería llevar a 100 millones de personas inmunizadas en 10 días.
En Brasil, las víctimas son más de 280.000, la mayoría de ellas en el estado de San Pablo, que cada día registra récords negativos.
El jefe de Estado brasileño, Jair Bolsonaro, quien contrajo el virus en la primera ola siempre ha minimizado los riesgos de la enfermedad con el presunto argumento de no estrangular la economía del país, pero ahora parece haber cambiado, al menos en vacunaciones.
«Tenemos un programa muy audaz, más de 400 millones de dosis negociadas hasta fin de año, este mes vamos a recibir 4 millones, la política de vacunación masiva seguirá», anunció, luego de elegir el pasado lunes a su cuarto ministro de salud. (ANSA).