Eliminar las manchas de grasa en las paredes de la cocina siempre ha sido un dolor de cabeza, pero ahora un sencillo truco casero se ha vuelto viral por su eficacia y facilidad de aplicación. Según El Universal, la combinación de bicarbonato de sodio y vinagre blanco está ayudando a miles de personas a limpiar sus muros sin necesidad de productos químicos caros ni complicados.
Estas marcas de grasa se forman tras freír, asar o simplemente cocinar a diario, dejando residuos difíciles de elimïnar, especialmente en paredes claras. La mezcla casera no solo ayuda a disolver la grasa acumulada, sino que también neutraliza olores y deja la superficie limpia y reluciente.
El procedimiento, según explica Noticais 24 hrs, es muy sencillo: se mezcla una cucharada de bicarbonato con un chorrito de vinagre blanco, se aplica sobre la mancha y se deja actuar unos minutos. La efervescencia que se produce permite que la grasa se desprenda fácilmente, tras lo cual solo hace falta pasar un paño húmedo o una esponja suave para terminar de limpiar.
Para las manchas recientes, se aconseja limpiar primero con agua tibia y jabón neutro antes de aplicar la mezcla. Si la grasa lleva tiempo incrustada, se puede repetir el proceso varias veces hasta conseguir un acabado perfecto, logrando resultados que sorprenden incluso a los más escépticos.
Además de su efectividad, este truco es económico y ecológico, evitando el uso de químicos agresivos que puedan dañar la pintura o dejar residüos. Su practicidad y resultados visibles lo han convertido en tendencia en redes sociales, siendo compartido por quienes buscan mantener sus cocinas impecables con métodos caseros y seguros.















