Tres coipos y una comadreja con dos crías se incorporaron al ecosistema de la Reserva Natural Educativa de Ingeniero Maschwitz. Fue posible gracias a un trabajo conjunto entre la Municipalidad de Escobar y la Dirección Provincial de Fauna, con controles del SENASA.
Se trata de una translocación planificada para fortalecer poblaciones en riesgo:
• Los coipos vuelven a cumplir su rol como “ingenieros del ecosistema”, manteniendo saludables los humedales
• Las comadrejas actúan como controladoras biológicas, regulando insectos y roedores
Estos nuevos habitantes ya recorren la laguna de la Reserva y su llegada beneficia a toda la cuenca del río Luján al aportar equilibrio, salud y diversidad a nuestros ambientes naturales.















